Bajo la Lupa

No se que me pasa pero llevo una semana sintiéndome rara, un poco melancólica y otro tanto triste y cuando el silencio de mi casa aparece, o quizá el silencio en mi mente, me da por llorar.
El otro día yo misma me lo preguntaba o tal vez se lo preguntaba a Dios, no tengo motivos para sentirme así por lo que nunca está de más culpar a las benditas hormonas, esas que están ahí siempre para ser el chivo expiatorio de todos nuestros dramas.
Quisiera que de pronto una alfombra mágica llegara a mi casa y me llevara a un sitio lejos, donde la rutina no tuviera pasaje, solo mi familia y yo pero cada día parece más un cuento de hadas. De pronto estos días, me ha vuelto a la mente mi sueño de irme a Canadá, necesito cambiar tanto de aires que hasta los muebles de mi casa he cambiado de sitio.
Y cuando hablaba de esto con Xavier, surgió a la platica el poema “Reir Llorando” de Juan de Dios Peza y me di cuenta que yo soy un poco como el paciente enfermo de tristeza, que al no explicarse su sentimiento acudió al médico y al ver que no era un problema de salud físico este le recomendó ir con el famoso comediante Garrick el cual lo haría morirse de risa y que olvidara sus males. Desilusionado el paciente le respondió “¡Yo soy Garrick ! Cambiadme la receta”. Al leerlo me quede pensando en las muchas veces que para ocultar una preocupación prefería hacerme la graciosa y hacer reír a mis amigas con tonterías, pero esta semana no fue así y tal vez eso me llevó a decir cosas duras a algunas personas que se creían mis pequeños problemas como una broma, que tal vez son insignificantes pero a mi me mortifican y por eso necesito desahogarlos. También dejé de darle importancia a la gente que una vez mas me demostró que solo esperan cualquier pretexto para ser negativas, ya bastante negatividad traía yo como para recargar la de ellos. Tal vez deje estos días de ser la buena persona que entiende, comprende y apoya porque por una parte me sentí defraudada, por otra ya estoy algo harta de lidiar con los problemas de otros y una parte mas esta cansada de que las cosas no se den para quien lucha demasiado. Yo también necesito cargar pilas, ordenar mis ideas y escapar a un sitio donde reencontrarme con la Garrick de antes.

Voy a admitirlo, en muchas de mis charlas con amigas, cuando tocábamos el tema, yo también las describía entre seriedad y burla como “la felicidad del hogar” y es que hay que aceptarlo, el servicio que nos prestan ayuda a que nos estresemos menos y podamos disponer de más tiempo para otras cosas, pero en que momento les dimos tanto poder?
Y hoy me siento molesta conmigo misma y con aquellas personas que en la ultimas horas me han dicho frases como “prefiero no llevarle la contraria para que no se me vaya”, “no me importa que limpie por encimita mientras yo no haga nada”, “yo le doy la razón porque me conviene”, “te enojaste con ella? Pues que le hiciste?” o “la echaste?? MENSA!!!”
Nunca había tenido problemas con ninguna de las personas que laguna vez han trabajado ayudando en el aseo, es más siempre me pareció despectivo llamarles sirvientas y cuando las describía siempre les decía “la muchacha que me ayuda”, pero todo llega a su límite y mi límite tuvo poca tolerancia cuando ante una llamada de atención se atrevió a levantarme la voz, enojarse conmigo y ponerse al tu por tu. Podré tolerar faltas, cambios de día, salida temprano pero una falta de respeto nunca y mucho menos que después de haga la victima con sus otras jefas con quienes comparto la semana de sus servicios.
Y es que analizando la situación y escuchando los comentarios de la mayoría de mis amigas, me he dado cuenta que les hemos dado un poder muy por encima de nosotros, nos hemos vuelto dependientas de ellas y por si eso no fuera poco, al menos en Monterrey, se les paga una muy buena cantidad de dinero por las escasas cinco horas que trabajan. Y no estoy diciendo que me pongo en huelga a contratar otra y a pagarle por esas mismas horas pero en ningún momento voy a tolerar caer en el conformismo solo porque más vale eso que estar limpiando la casa todo el día, vamos en ninguna empresa se tolera eso y mucho menos si esa empresa es tu propia casa.
Simplemente no entiendo, al menos ayer más de una amiga me hizo sentir cono la villana del cuento, hubo alguna que hasta mencionó que a ella le convenía estar bien con la persona de servicio en cuestión y por lo tanto demostraba darle la razón. Yo por mi parte considero que merezco respeto, le he dado trabajo, regalos, he tenido consideraciones, la he recomendado y le tenía toda la confianza pero aceptar que me levante la voz es demostrarle que efectivamente tiene poder y caer en el mismo conformismo de algunas de mis amigas.

El día 15 de Mayo en México es la celebración del día del maestro, el periódico El Norte, lanzó una convocatoria para que sus lectores escribieran una anécdota sobre algun maestro, me decidí a enviar mi escrito porque yo no tenía que ir muy lejos en mis recuerdos para buscar un maestro especial en mi vida, ya que mi padre dedicó más de 40 años a esa profesion. Les presento lo que escribí, no se si llegará a ser de los elegidos a ser publicados mañana pero me basta con que mi padre ya lo leyo y le gustó mucho:

Cuando era niña, quería ser como ella…me parecía tan sabia y perfecta! Era a la primera persona a la que acudía cuando me hacía alguna herida en la rodilla o cuando peleaba con alguna amiga por tonterías que a mí me parecían el fin del mundo, siempre estaba ahí para defenderme.
Con el paso del tiempo, muchas cosas fueron cambiando, tal vez empecé esa etapa de rebeldía de la cual aun me cuesta salir o simplemente me di cuenta que ella no era tan sabia como yo creía sino un ser humano como muchos. Las mamas de mis amigas parecían mejores pues se comportaban mas como sus amigas y al final del día, yo sentía que mi objetivo como hija era solo contradecir porque necesitaba ser rebelde.
Después me fui dando cuenta, que amigas yo podía tener muchas pero madres no, y que de alguna manera me había hecho bien esa imagen cariñosa de una madre a la hora de consolar y la imagen dura al momento de reprender.
Y no significa que por haber pasado la adolescencia no siga teniendo diferencias con ella. A veces desearía que entendiera que ya no soy una niña y que respetara más mis decisiones y mi forma de vivir la vida, pero a fin de cuentas, dicen que para los padres los hijos nunca crecen y por otra parte, no puedo pedir que mi madre sea perfecta, ni seguir creyendo, como cuando era niña, que es la mujer maravilla. Solo es un ser humano, que al igual que yo, no tiene todas las respuestas en la mano y que lo más seguro con lo que cuenta, es el amor que nos tiene.
Hoy que soy madre, quisiera hacer algunas cosas diferentes pero la esencia con la que mi madre nos educó, la mantendría porque después de todo creo que hizo muy buen trabajo. Mi madre no es perfecta, no es sabia, pero es mi madre y tal vez pasen los años y sigamos discutiendo por mil cosas pero eso no cambiará nuestros sentimientos.
Uffff, y eso es solo mi breve historia…pero si miramos alrededor nuestro siempre habrá una mujer viviendo su propia maternidad…aquella niña que juega con sus muñecas a alimentarlas y arrullarlas, aquellas mujeres que anhelan un milagro que les permita ser madres, otras que esperan la llegada de ese hijo que nunca más volvió, las que lloran porque aquel que vio nacer también lo vio morir, las que miran a los suyos sabiendo que la vida se les agota, las que tuvieron que entregar a los suyos, responsablemente, para que tuvieran una mejor vida, las que hoy podemos abrazar a los nuestros considerando eso como el mejor regalo…..innumerables historias para una sola palabra: Mamá.

¡Feliz Día de las Madres!

Ni modo, debo admitir que sigo siendo fan de la televisión aunque he hecho muchas cosas por dejarla, aunque bueno, debo reconocer que rara vez puedo sentarme a ver un programa completo porque siempre estoy haciendo todo a la vez.
Y como fiel televidente empiezo a tener expectativas de que la televisión en México esta a punto de cambiar. La próxima semana dan inicio cuatro series hechas totalmente en nuestro país y que vienen a romper con el tipico esquema de la televisión mexicana, caracterizada por invertir mucho en telenovelas y programas de sketchs que solo muestran mujeres con poca ropa bailando.
Confío en que si estos cuatros proyectos que están a punto de iniciar, funcionan, será como darle un giro a lo que productores conformistas nos han dado por años.
Se quiere competir y se quiere poner imágenes de calidad en la pantalla, solo nos falta esperar que también se tenga interés en brindarnos buen contenido.
Pero yo si pienso darles la oportunidad y ver al menos el primer capítulo de cada serie, aunque viendo los cortos promocionales solo hay dos que me llaman la atención.
El lunes inicia El Pantera, basado en un comic mexicano de un hombre de fuerza que lucha contra la maldad y delincuencia de la gran Ciudad de México, no es un superhéroe ni tiene poderes mágicos. El Pantera será protagonizado por Luis Roberto Guzmán que aunque ha hecho carrera en telenovelas, también lo ha hecho en cine y actualmente me parece de lo mejor que hay en el país actoralmente. Lo malo de este día es que se me empalma con “Lost” y “Grey´s Anatomy” pero para algo existen las grabadoras.
El martes le seguirá “Sexo y otros secretos”, de inicio me da la impresión que es un tipo “Sex and the City” pero me agrada ver la trama basada ahora en mujeres mexicanas, me gusta el elenco, que fuera de Susana González todas han hecho principalmente su carrera en cine y espero que como dicen sus productores, no copie a la serie de Sarah Jessica Parker sino que tenga su propia identidad. Además, más o menos son de mi edad y me gusta eso de que las treintonas estemos de moda.
El Miércoles se descansa, desconozco que programará Calan 5 ese día, pero se lo tienen guardado para otra cosa y bien para mí, que no cambio a las “Desperate Housewives” por nada.
Y así llegamos a lo que a simple vista yo veo como la parte floja de la semana, un jueves con Adal Ramones ahora actuando en “Y ahora que hago?” y el terror de “Miedos” que aunque no me llama la atención al menos he visto que tiene muy buenos efectos y es muy del estilo de la película mexicana “Km 31”.
Claro, cada una de las series es posterior a diferentes series americanas exitosas que no nos habían llegado a la televisión abierta, entre ellas Heroes y Dr. House que me han recomendado mucho y que no he tenido oportunidad de ver debido a que las transmiten en cable por un canal que nunca he acostumbrado a ver y por lo tanto no se ni donde se ubica.
Vamos a ver si es cierto que se tiene el plan de cambiar la televisión en México…ya les contare…..

Ella es Nala, una pequeña snauzer de un mes de nacida que hace cuatro días se convirtió en un miembro más de esta familia. Desde entonces Diego está mas que feliz con su nueva amiga, la acaricia, grita de emoción al verla, la abraza y la parte más cansada para mi es que quiere estar agarrando todo lo que rodea a la perrita, incluso su comida, así que por ese motivo me he dado cuenta que soy un poco valiente por tener bajo mi responsabilidad a dos seres pequeños a los que debo enseñar a la par muchas cosas.
Nala llegó a casa muy seria, tal vez triste por haberse separado de su mama y hermanitos pero conforme fue avanzando la semana ha tomado más confianza y cada vez indaga por mas partes de la casa. Le gusta echarse junto a mis pies y lamer mis dedos aunque alguna que otra vez también muerde un poco como jugueteando con ellos.
De inicio con Diego hacía lo mismo, pero el se quedaba inmóvil y un poco con cara de asustado como si estuviera preguntando ¿Que me va a hacer?. Ahora ya no se paraliza tanto sino que empieza a caminar rápido con la sonrisa en los labios como queriendo ser ahora parte del juego de Nala.
Es un poco extraño tener una mascota en casa, hacía muchos años que no tenía una y eso fue cuando aun vivía con mis padres, aunque para ser honestos, parecían mas de mi mama que era la que los alimentaba y cuidaba, nosotros solo nos dedicábamos a jugar con ella un poco como ahora pasa con Nala.
Tan pronto como le pongamos sus primeras vacunas, comenzaremos a llevar a Nala al parque, Diego siempre ha disfrutado de ver a los niños junto a sus perros paseando y algunas veces se acercaba a ellos para acariciarlos, eso fue lo que nos motivó para traer a Nala a casa, ya que desde que era un bebé demostraba su especial interés en los perros y aunque aun no sabe decir su nombre, cada vez que nosotros lo pronunciamos corre hacia donde suele estar Nala para saludarla o pedir que le abramos la puerta del patio y salir a jugar con ella y con su vasija de agua.

Un año mas…el segundo para ser precisos. Y aquí estoy aun, desnudando mi alma, mis pensamientos y todo lo que llevo dentro.
Muchos han estado de paso por aquí, otros se han quedado y se han convertido en parte esencial de este medio de expresión aceptándome con mis locuras y sobre todo entendiendo que lo rico del ser humano es que somos todos diferentes y que con nuestras ideas nos complementamos unos a otros.
Este año mi blog cambio de apariencia volviéndose un poco más como su autora, dándole un poco de seriedad para tomarme esto de la escritura con respeto y con unos pocos de matices grises dispuesta a ir coloreando poco a poco todo lo que me rodea a través del aprendizaje.
Dicen que cuando dejas de aprender tu vida se detiene y mueres y la parte buena es que creo que aun me queda mucho por aprender así que espero que este espacio siga teniendo vida mucho tiempo más.
Gracias por estar aquí, por quedarse y por enriquecer mis pensamientos con sus comentarios y con sus blogs.
Perdón por repetir la canción del año pasado, pero aunque soy una constante buscadora de música y letras, hasta el momento no he encontrado otra mejor manera de medir el paso de un año más.