Bajo la Lupa
martes, abril 29, 2008
Ausente

Etiquetas: Vida Diaria
miércoles, abril 23, 2008
Tarea Dificil

El día termina…he tenido que ir a la tienda de la colonia a comprar una cerveza para relajarme un poco porque si alguien dijo que estar en casa cuidando de los hijos era fácil se equivocó. No es nada fácil, podrá traer más satisfacciones que cualquier otra cosa que hagas, podrá ser el trabajo que realices con más amor en tu vida pero la presión es demasiada, fallar aunque sea un poco puede ser determinante para lo que venga.
Tengo un hijo de dos años y medio y siento como si fuera un adolescente, por algo le llaman a esa edad los “terribles dos” pero nunca imaginé que fuera agotador no tanto física sino mentalmente y la mayoría de las veces en lugar de sentir que se debe a la edad pienso que es porque tal vez en algo he fallado, tal vez lo consentí demasiado cuando era un bebe, tal vez cometí el error de sobreprotegerlo tomando en cuenta que el ser padre por adopción te lleva al riesgo de ser más condescendiente…no sé, supongo que alguna vez todos reciben quejas en el colegio sobre el comportamiento de sus hijos pero aun así es imposible dejar de sentirme triste y culpable porque ha pegado a otros niños o ha estado huraño durante la mañana, al final de cuentas no es más que un niño y pienso que de alguna manera soy responsable por su comportamiento.
A veces no sé cómo hacer las cosas, es cierto que nadie aprendió a ser padre de la noche a la mañana, y muchas veces hasta el mayor esfuerzo parece como si fuera dirigido hacia la pared en donde las cosas solo rebotan pero no hay respuesta.
Lo único que quiero más que nada en el mundo es que mis hijos sean felices y buenas personas, a su corta edad siento que han luchado mucho por sobrevivir por las circunstancias en las que llegaron al mundo pero en el camino no quiero irme por el rumbo equivocado y malcriarlos o por el contrario exigirles demasiado, y cuando pienso en todo eso no hago más que pedir a Dios “por favor que solo sea la edad por la que atraviesa”.
domingo, abril 20, 2008
La Luna tras el cerro

Unos momentos más tarde noté que no todos se dan cuenta, mientras mi hijo me decía que había visto a la luna y yo le respondía que se veía hermosa hoy, alguien que pasaba a nuestro lado miro hacia arriba más por curiosidad que por costumbre tal vez. Las estrellas podrán ser hermosas, pero en una ciudad donde al oscurecer predominan las luces de neón y mercurio pareciera como si hubieran dejado ya de existir. Hace tan solo una semanas, en lo alto de Villa de Santiago, mientras disfrutábamos una cena en la quinta de unos amigos me maravillé del techo que teníamos por encima, el cielo totalmente negro y millones de estrellas sobre nosotros, bastó bajar unos cuantos kilómetros e internarnos en el pueblo para haberlas perdido de vista…con la luna aun no pasa eso, la luna se impone ante lo que sea sin importar que las lámparas de las calles o las luces de los coches nos encandilen.
Hoy había una hermosa luna, pero definitivamente lo que me cautivó es que sin verla la pude admirar escondida detrás del cerro.
Etiquetas: Contemplando
viernes, abril 11, 2008
Sí me siento Mexicana

Estoy perdida…estaba asombrada por la fuerza de una mujer como Ana Bolena y la manera en que cambio la historia de su país por amor o manipulación (depende de quién cuente la historia) y de tener en mente de hablar de una mujer poderosa he terminado por aterrizar mis ideas en un tema más personal, la mujer mexicana.
Esta tarde camino a casa escuchaba una entrevista que realizó Fernanda Familiar a Issa López directora de la película “Casi Divas”. Debo admitir que de inicio me asombro la gran facilidad de esta directora para hablar de una historia que podrá parecer simple pero ella lo aborda como si fuera todo un estudio psicológico sobre la mujer de nuestro país, esa mujer que de la noche a la mañana busca la fama tal vez porque cree que será mejor persona, será aceptada, cumplirá sus sueños, comprara sus antojos, entre muchas cosas más que solo demuestran la carencia de algo como sociedad…todo estos visto a través de los ojos de las diferentes mujeres mexicanas que habitan este país, este país que se llama Estados Unidos Mexicanos pero que solo hacemos el honor al nombre en los mundiales de futbol y olimpiadas.
En la entrevista una pregunta fue llevando a la otra y al final terminaron por preguntarse qué tan mexicanas podían sentirse en un territorio lleno de más diferencias que la misma cantidad de kilómetros que lo conforman.
De norte a sur, de clase social en clase social, la mujer mexicana puede ser tan diferente una de otra que en lugar de parece procedentes de un mismo país podríamos vernos como extranjeras las unas a las otras.
Recuerdo cuando estudiaba en Canadá, había un chico mexicano que me saludaba siempre de lejos con un simple “Hi”, un día se asombró al verme platicando con alguien más en español y le dijo a esa persona que siempre había creído que yo era europea, sin embargo yo misma veo mi apariencia lejos de parecer europea, tal vez después de la conquista y tantas mezclas terminé por convertirme en una especie nueva de mexicana que a los extranjeros les cuesta ubicar en lo que comúnmente ellos conocen propio de esta tierra.
Lo que no sé y me preguntó es si la mexicana indígena puede tener el mismo sentir que yo, tal vez en el fondo ella también puede sentirse fuera de lugar en un sitio que le pertenece y que le enorgullece tanto como a mí….así que analizando el punto y después de tener mis dudas llego a una conclusión sobre sentirse mexicana. Sí me siento mexicana, no tengo porque dejar de sentirme así. Parte de la riqueza de nuestro gran país es la diversidad, las culturas se nutren con las diferencias que hay entre unos y otros y tal vez yo me sienta extraña junto a un grupo de indígenas, de sureños con acento diferente al mío o de gente de clase alta pero al final lo que cuenta es el aprendizaje que pueda obtener de ellos y saber que no porque estemos en una misma tierra tenemos que ser iguales.
Etiquetas: Mexico, Reflexiones