Bajo la Lupa
sábado, junio 02, 2007
Mirando las Estrellas
Tenía años de no mirar al cielo y ver las estrellas pero amoche en el parque, un impulso me llevó a sentarme en un columpio y mientras me mecía miraba hacia el cielo. La noche despejada me permitió contemplar el brillo de las estrellas, que hace mucho no veía, después me recosté en el resbaladero y ahí, mientras miraba el techo estrellado caí en la cuenta de lo rápido que vivimos, porque antes tenia la oportunidad de pararme junto a mi ventana y ver al cielo, porque antes me daba el tiempo de buscar la más brillante y pedirle un deseo, porque antes me impresionaba del brillo de los planetas y me quedaba mirando quieta para descubrir aquellos astros que no centelleaban, porque antes imaginaba que había alguien detrás de esa estrella especial velando por mi.
Perdí el tacto, perdí la noción de las cosas simples el día que la vida diaria me absorbió y me convertí en un ser humano que solo va y viene deprisa, y que no tiene tiempo a detenerse y mirar hacia arriba para contemplar esa pequeña parte del universo que me vigila desde lo alto.
Si trato de recordar algún momento reciente en que me detuve, solo vienen tres a mi mente, esa mañana sentada junto a una caleta de Xcaret mirando hacia el horizonte, aquella tarde frente a Moraine Lake contemplando lo majestuoso de las montañas rodeando y reflejándose en el lago y el instante en que vi por primera vez a mi hijo mirándome con sus ojitos bien abiertos.
Necesitaba detenerme un momento otra vez, y aun así, aun no me es suficiente, quisiera poder detenerme un poco más.
Perdí el tacto, perdí la noción de las cosas simples el día que la vida diaria me absorbió y me convertí en un ser humano que solo va y viene deprisa, y que no tiene tiempo a detenerse y mirar hacia arriba para contemplar esa pequeña parte del universo que me vigila desde lo alto.
Si trato de recordar algún momento reciente en que me detuve, solo vienen tres a mi mente, esa mañana sentada junto a una caleta de Xcaret mirando hacia el horizonte, aquella tarde frente a Moraine Lake contemplando lo majestuoso de las montañas rodeando y reflejándose en el lago y el instante en que vi por primera vez a mi hijo mirándome con sus ojitos bien abiertos.
Necesitaba detenerme un momento otra vez, y aun así, aun no me es suficiente, quisiera poder detenerme un poco más.
Música: High - James Blunt
Imagen: Child looking up at the stars - Unknown
Etiquetas: Memorias, Reflexiones
Escrito por Patricia a las 12:52 a.m.
7 Comments:
Hay veces que estamos tan concentrados en la "vida cotidiana", que olvidamos el valor de todo lo que nos rodea....pero tu ya lo recuperaste Paty, envidio tu noche de anoche bajo las estrellas, recuerdas tres y estoy segura que hubo mas, pero estas tres, estoy segura que tienen un valor muy especial en tu corazon,no se diga la de la mirada de tu hijo.....esa tambien la senti yo (la de mis hijos) y es lo mas hermoso que una madre pueda recibir!!!
Besitos =)
Hola Patricia,
Vi que dejaste un mensaje en un blog de inmigrantes a Canada.
Yo llegue con mi familia hace casi cinco a&os y estamos muy contentos en este increible pais.
Te recomiendo el siguiente blog de un amigo mio que vive en Montreal, sus comentarios son muy utiles tanto para los tramites como para el inicio al llegar a Canada.
CASAS & CASOS en Montreal
el autor el Gustavo Comas
http://casasycasosenmontreal.blogspot.com/
Hizo un video-clip sobre Montreal muy interesante:
http://www.youtube.com/watch?v=JlQKmXQCsNI
Saludos
Arturo Morales
Pues... no se que decirte nena... solo que primero intentes serenarte, y escuches tu corazon, solo tu sabes lo que es mejor para ti, y para tu familia, decidas lo que decidas, te apoyaré, pero esta claro que algo hay que cambiar.
TQM
Ché Patri, cómo te tiene ese nene eh! cada vez que te leo hacés que se me caigan las babas!
besos
Es increíble los pensamientos que se encuentran alojados en la mente y que solamente podemos escuchar cuando nos damos tiempo para dejarlos llenarnos. Darse tiempo para descubrir lo que se encuentra a nuestro alrededor es un arte perdido. Y eso que según esto la tecnología esta aquí para ahorrarnos mas tiempo...yo no lo pienso así. Las cosas sencillas son las que valen la pena. Gracias tocaya, por recordarme de tomar un tiempo para escuchar lo que hay dentro de mi.
simples insignificancias pueden hacernos bien, vamos tan a prisa por la vida que se nos olvida lo elemental, dejamos pasar cosas al parecer insignificantes pero que al final resultan reconfortantes,,,
Que bueno que hayas notado que vivimos de prisa, y recordado las cosas simples.
Es tan dificil que la gent elo note en estos dias.
Y son tan gratificantes...
Disfrutalas de vez en cuando, y enseña a Diego a disfrutarlas, por que como va nuestra sociedad, nos van a hacer falta mas cosas buenas que nos ayuden a sobrevivir.
Un abrazote
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